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El chile confitado vegetariano añade un sabor suave y no picante a todas sus preparaciones culinarias. También es perfecto para marinar carne o pescado.

En el caso de una producción de ultracongelados, puede ser necesaria una calibración, o incluso una clasificación, con vistas a una optimización global del proceso y del almacenaje de los productos, así como de su calidad. En esta etapa de la producción, FEMIA ofrece diferentes funciones de procesos que pueden utilizarse después de la ultracongelación como, por ejemplo, la limpieza, la calibración y la clasificación. Nuestras soluciones le permiten clasificar de manera eficaz los productos según su calibre (guisantes, coliflores, brócolis u hortalizas cortadas) para limitar el almacenaje intermedio y su gestión antes de la ultracongelación. Gracias a la clasificación y al calibrado posterior a la ultracongelación, podrá almacenar sus productos ultracongelados a granel en grandes contenedores y ensacarlos en función de los pedidos para ajustar los flujos de producción.

Lava la mayoría de hortalizas. Capacidad 5 t/h a 15t/h según el modelo y el producto tratado. Máquina que consta principalmente de una cuba de lavado, bombas que permiten crear flujos turbulentos, un molinillo de palas para el avance de las hortalizas flotantes y una cinta elevadora. Recuperación del agua en una cubeta de decantación a la salida del lavador y filtración del agua con tambor rotativo de hilos y su rascador para separar los residuos. Circulación de agua en circuito cerrado para un bajo consumo de agua. Según los productos tratados, un molinillo de palas puede sustituirse por una trampa para insectos. De forma opcional, puede integrarse en el lavador una trampa para datura.